¡Récord Guiness a la mayor calabaza de Aragón!
¡Quién me iba a decir a mí que iba a crecer semejante calabaza! ¡128 kilos, madre mía!
Resulta que hace unos meses paseando por Bujaraloz vi un cartel con un concurso a la mayor calabaza del año y dije: ¿Por qué no?
En la huerta de casa reservé un espacio para las calabazas. No puse muchas, solo 8 o 10 semillas de calabazas de Buerba, una variedad local aragonesa que ya había puesto otros años y sabía que se da fetén, salen redondicas y muy sabrosas. Las puse bien separadas, con idea de que tuvieran cacho para crecer. Les eché l compost orgánico, gallinaza y nada más, las cubrí con paja en cuanto asomaron y las regué las semanas que no llovía.
¡No esperaba semejante calabaza, la verdad! Otros años habíamos cogido calabazas majas, para unas buenas tartas y unos buenos purés, pero con esta he batido el récord de Aragón. Cuando la vio mi madre soltó: «no veía una calabaza así desde que di a luz».
Cuando vinieron los del Récord Guinness a casa primero se equivocaron y empezaron a medirme la cabeza. Luego no podían levantarla entre 4 y al final lo consiguieron, la pesaron, me dieron el diploma y me dijeron que se la llevaban al Festival de Arte y Calabazas de la ciudad de Half Moon Bay, en California, donde se conoce que llevan las calabazas más majas del mundo. Estos del Guinness no dan ni un duro, un certificado y una línea en su libro, pero sí me han invitado al sarao ese que es a finales de enero, así que si encuentro un barco a vela, lo mismo voy.
Lo que sí tengo es un montón de llamadas de medios de comunicación para entrevistas y reportajes. Hoy he grabado con el programa «Súper Farmers» de la Fox, con Agropopular de la Cope, con el programa francés «Cultivons-nous» y con «Tempero» de AragónTV. Especial ilusión me ha hecho la visita de Canal Red, que incluso me ha propuesto un programa de «Agricultores rojeras por el mundo». Ya os contaré.
Es para mí un honor que Aragón se conozca entre las mejores cucurbitáceas de la Tierra y, además, cultivadas de forma agroecológica, sin fertilizantes químicos. ¡Calabaza, yo te llevo en mi corazón!
Más información en la página oficial de Guinness World Records.
