“Matadero Cinco” de Kurt Vonnegut y la novela gráfica de Albert Monteys y Ryan North
Mi amigo Carlos (Xcar Malavida) me regaló esta novela por mi cumpleaños. Kurt Vonnegut es uno de sus autores favoritos y a mí ya me tocaba leer “Matadero Cinco” (o “La cruzada de los niños”). Esta reseña va a ser conjunta. Del libro, editado por Blackie Books, y del tebeo, publicado por Astiberri. Mi primer comentario va para estas dos editoriales, por unas publicaciones estupendas, que da gusto leer.
“Creo que van a tener que inventarse ustedes un montón de nuevas mentiras maravillosas o la gente no querrá seguir viviendo”.
Del autor, qué puedo decir yo que no se haya dicho. Pretendía escribir un libro sobre la guerra, sobre la experiencia que él vivió como soldado raso y prisionero. Pero en lugar de plasmar la barbarie de la Segunda Guerra Mundial con dramatismo, Vonnegut dejó volar su imaginación, para llevarnos a su universo de humor negro, que a mí personalmente me hace reir. Su manera de abordar el sufrimiento humano, el sadismo y la matanza de los bombardeos de Dresde en 1945 está totalmente alejada de una historia bélica al uso o de un panfleto antimilitarista. Es todo eso y mucho más.
“Habíamos olvidado que las guerras las libran los críos”.
Poco os voy a contar del cogollo de la trama: Billy Pilgrim está muerto para el mundo y no parece tener mucho interés por la vida, pero en su interior destellea una mente que viaja en el tiempo y le lleva a mundos extraterrestres, a su infancia, a la guerra o incluso al momento de su muerte. Como le recomiendan sus amigos tralfamadorianos, se trataría de “no hacer caso de los momentos espantosos y concentrarse en los buenos”.
“Es lo que hay”, frase que se repite una y otra vez en la novela, es una de las citas literarias más tatuadas en el mundo, porque este libro se ha convertido en una obra de culto y Vonnegut en un autor de referencia de la contracultura.
“Apenas hay personajes en esta historia, y casi no hay enfrentamientos dramáticos, porque la mayoría de las personas que aparecen en ellas están enfermas y son los juguetes indiferentes de fuerzas inmensas. Al fin y al cabo, uno de los efectos principales de la guerra es que la gente pierde las ganas de ser un personaje”.
En cuanto al tebeo, que compré en el reciente Salón del Cómic de Zaragoza, me parece una maravilla. No es fácil llevar al grafismo una novela tan original como la de Kurt Vonnegut y Ryan North, al guión, y Albert Monteys, con los dibujos, consiguen una obra preciosa a la que han dado su propio toque, ensalazando y mejorando la historia. Leí la novela y a continuación el tebeo y os recomiendo esta experiencia. Me ha gustado muchísimo cómo plasman en viñetas algunas escenas que había imaginado y cómo recrean con maestría la adaptación gráfica de la novela. Muy muy buena.
