“Una breve historia de la igualdad” de Thomas Piketty
“Las cuestiones económicas son demasiado importantes como para dejarlas en manos de una pequeña categoría de especialistas y dirigentes. La reapropiación del conocimiento económico por parte de los ciudadanos es un paso esencial para transformar las relaciones de poder”.
Este libro es una síntesis de los numerosos libros y artículos de estudio de Thomas Piketty, uno de los economistas más reconocidos e influyentes en el camino hacia la justicia social. Como él mismo escribe “en este libro he defendido la posibilidad de un socialismo democrático y federal, descentralizado y participativo, ecológico y con mestizaje social, basado en el desarrollo del Estado social y la fiscalidad progresiva, el reparto del poder en las empresas, las reparaciones poscoloniales y la lucha contra la discriminación, la igualdad educativa y la tarjeta-carbono, la progresiva desmercantilización de la economía, la garantía de empleo y el sistema de herencia universal, la reducción drástica de las desigualdades monetarias y un sistema electoral y mediático que quede por fin al margen de la influencia del dinero”.
En menos de 300 páginas editadas por Deusto, Piketty desarrolla algunas de sus propuestas, como continuación de todos los cambios que hemos experimentado en el pasado. Así, hace un trabajo riguroso de exposición de datos, procedentes de economías e historias tan diversas como Francia, Suecia, Estados Unidos, China o India, para demostrar que al menos desde finales del siglo XVIII existe una tendencia histórica hacia la igualdad, pero aún tenemos mucho camino por delante. En este sentido, algunas personas me habéis preguntado si es un libro accesible y creo que sí, ya que las tablas y las notas a pie de página son aportaciones complementarias a la lectura continua del libro, que considero que es pedagógica para todo tipo de personas interesadas en economía.
La parte del análisis de la historia sobre la desigualdad no os la voy a resumir, porque está llena de indicadores y reflexiones propias de las ciencias sociales que merece la pena que estudiéis. En síntesis, no hay una estación de llegada, sino que todas las organizaciones económicas evolucionan y son fruto de las movilizaciones sociales, de luchas y rebeliones. En este sentido, me parece un libro complementario a “Cómo ser anticapitalista en el siglo XXI” de Erik Wright, que reseñé recientemente y me gustó muchísimo.
Según Piketty “la desigualdad es ante todo una construcción social, histórica y política” y, por tanto, los conflictos sociales son innatos a cualquier evolución en las relaciones de poder. Así, las crisis económicas y financieras suelen ser momentos disruptivos y por eso es de especial interés leer el libro en este momento, porque nos ayudará a definir las instituciones democráticas que necesitamos construir para avanzar en nuestras organizaciones colectivas. Necesitamos más ciudadanos activos que se reapropien del conocimiento y se sumen a poderosas movilizaciones sociales que nos permitan alcanzar nuestros objetivos universalistas e internacionalistas de justicia social, fiscal y medioambiental.
Piketty anticipa que las catástrofes ambientales que van a venir con el cambio climático pueden desencadenar una toma de conciencia colectiva “saludable” que legitime una profunda transformación del sistema económico y nuevas formas de intervención pública. Pero todo esto solo será posible si somos capaces de articular fuertes movilizaciones para que la balanza del equilibrio del poder venga del lado de la mayoría social.
Para mí lo más importante de este libro es que te invita a deliberar y, sobre todo, a experimentar, que anima a cooperar para construir sociedades mejores, con visión universal y que la igualdad siga su curso.