“Ixo Rai! ¡Bendita fue la hora!” de Alfonso Urben
Ixo Rai! es una parte importante de mi vida. Sus conciertos nos llevan a una de las mejores épocas de nuestra juventud. Sé que muchos de los que me leéis compartisteis conmigo esas borinas en pueblos, en plazas, en la Sala Multiusos, en Interpeñas o en el Príncipe Felipe. Eran conciertos de banderas y camisetas, de pesetas y litros, de amigos y risas, sin móviles ni fotos. No tengo ni una sola foto en un concierto de Ixo Rai!
Y, sin embargo, este libro nos trae muchos recuerdos. Buenos recuerdos. Recuerdos de las luchas por la insumisión contra el militarismo, de la autonomía zapatista en Chiapas, de la resistencia aragonesa contra los pantanos y trasvases. De la Madalena a Villanueva, el Pirineo o Sevilla. Los ritmos de Ixo Rai! venían de muchas partes del mundo, pero el contenido era de aquí, muy nuestro, somarda e irreverente, comprometido y con rasmia. Nos hacían divertirnos con sentido, en un jolgorio sanote, unas lifaras tremendas que aglutinaban chobenalla, reivindicación y sentido común.
Este libro, editado por Rolde de Estudios Aragoneses, recoge las vivencias de Alfonso Urben, el bajista, pero no solo. El prólogo de Pardinilla, las fotografías y el epílogo de cada uno de los miembros de Ixo Rai! conforman el puzzle de 14 años de vida musical, de idas y venidas, de anécdotas y encuentros, de desencuentros con la industria discográfica, de borracheras, mondongo, porros y crecimiento personal y musical. Porque Ixo Rai! fue un buen grupo de música, una formación a la que echamos de menos. Mucho. Que nos ayudó a querernos más, a amar Aragón, a acercarnos al compromiso colectivo. ¡Bendita fue la hora!, Ixo Rai!
¿Cuántas veces hemos fantaseado con la vuelta de Ixo Rai!? He leído el libro mientras escuchaba sus canciones y, para mí, Ixo Rai! nunca se ha ido, y es una parte imprescindible de la banda sonora de mi vida y, además, tengo la suerte de conocer y disfrutar de la amistad con algunos de sus miembros. Gracias.